Propuestas para Conferencia Cambio Climático

2010-04-22 00:00:00

Nosotros y nosotras, militantes de distintos movimientos populares, organizaciones sociales y colectivos en lucha en Venezuela, nos hemos venido articulando para la promoción de la constitución del Consejo de Movimientos Sociales por el ALBA, capitulo Venezuela. Recalcamos que estamos en convocatoria amplia, abierta y permanente, siempre con el principio de la construcción colectiva y desde abajo en los diferentes niveles de articulación de los pueblos (local, regional, nacional, y gran nacional).
 
Este documento se concibe como un preliminar de trabajo, en el cual presentamos la síntesis y los acuerdos de los debates en torno al proceso preparatorio de la Conferencia Mundial contra el Cambio Climático y los Derechos de la Madre Tierra. Refleja entonces, nuestras posiciones comunes, nuestras luchas, nuestras miradas, angustias, esperanzas.
 
El que estemos aquí reunidos como un encuentro entre pueblos, en el marco de reconocer nuestras luchas y orientarnos en pro de las que son comunes, es un paso fundamental para la integración y está directamente derivado de los avances de la propuesta del ALBA-TCP. En ese sentido hay logros importantes en la lucha, que representan los primeros pasos: nuevas formas de cooperación económica solidaria, apoyo mutuo en lo energético por educación y salud, acuerdos políticos por la trasformación del sistema, entre otros.  El sistema de trueke como forma económica alternativa, sustentada en el intercambio es un ejemplo concreto de estos avances.
 
Tomando en cuenta todo esto, nuestros debates y nuestra propuesta están centrados en la necesidad de la transformación del modelo civilizatorio dominante, el reconocimiento de los Derechos de nuestra Madre Tierra, y la autodeterminación, la soberanía e integración de y entre los pueblos.
 
Creemos profundamente en la unidad e integración entre pueblos, lo que construye día a día el proceso revolucionario bolivariano. Nuestro trabajo se sustenta en transitar un camino que nos lleve decididamente al socialismo, tal como lo plantea nuestro Presidente Hugo Chávez Frías. Un socialismo que combata todas las formas de dominación y opresión existentes, y combata al modelo civilizatorio hegemónico, que es capitalista, neoliberal, belicista y patriarcal.
 
 
 
1. CAUSAS ESTRUCTURALES
 
Parte del debate fundamental sobre la crisis ambiental y el cambio climático está en configurar cuáles son sus causas estructurales; cómo y porqué se genera; y cuáles son las cuotas de responsabilidad.
 
La crisis ambiental es la expresión profunda de la crisis del modelo civilizatorio que está acabando a corto plazo las posibilidades de vida en el planeta en todos sus órdenes. Tiene una de sus expresiones en el cambio climático, en la mercantilización de todos los órdenes de la vida; en la guerra por los “recursos” naturales, la crisis financiera mundial y en el declive del modelo democrático representativo liberal.
 
Así, no es sólo hablar de crisis capitalista, porque muchas experiencias fallidas de socialismo copiaron las mismas lógicas, prácticas y métodos del capitalismo. Por eso afirmamos que se trata de una crisis del modelo civilizatorio, del patrón de conocimiento, donde el único sujeto es el hombre, propietario, blanco, heterosexual, racional, occidental y todo lo demás se considera un objeto, las mujeres, los desposeídos, otras razas, otras culturas y la naturaleza.
 
En el modelo civilizatorio hegemónico se subsumen y articulan distintas expresiones de dominación: el patriarcado, el racismo, la explotación a través del trabajo; la dominación de la naturaleza, etc. Este modelo tiende a ser etnocida, exterminando y oprimiendo a otras culturas y sociedades que siempre han tenido una relación armónica con la naturaleza y que constituyen alternativas vivas a la crisis en la actualidad.
 
Los seres humanos somos parte de la naturaleza, pero el mismo modelo nos ha llevado a construir una barrera, nos vemos entonces separadamente, por encima de ella, desde una visión antropocéntrica. Eso forma parte del imaginario, del patrón de conocimiento que nos han impuesto y que seguimos reproduciendo, y que determina muchas prácticas culturales que atentan contra la naturaleza. Si en la sociedad hay relaciones de dominación entre sujetos, también genera una relación de dominación hacia la naturaleza.
 
El sistema patriarcal es anterior al capitalismo; sin embargo, en éste se articula y se potencia. Parte de la relación de dominación que se expresa entre seres humanos, y entre los seres humanos y la naturaleza, está asociada a un patrón de conocimiento, al que solo algunos tienen acceso y en el que existen distintas calidades de sujetos.
 
Es necesario generar una relación distinta con la naturaleza iniciando por el cuestionamiento a fondo, y la transformación de todas las formas de opresión y de dominación, entre ellas, las que se expresan desde las lógicas patriarcales, que están presentes en el modelo civilizatorio hegemónico y que seguimos reproduciendo cotidianamente.
La responsabilidad es de los seres humanos, pero es diferenciable: no todos y todas lo generaron con las mismas cuotas de responsabilidad. Pues hay que reconocer que incluso, pueblos enteros y sus culturas, han sido exterminados y muchos otros están sometidos y en camino a desaparecer, si este modelo civilizatorio continúa.
 
Y es que el modelo civilizatorio, con su paradigma de desarrollo y progreso, su  patrón de conocimiento hegemónico, determina practicas de explotación masiva e indiscriminada de las bondades de la naturaleza a favor de los intereses económicos, así como una forma de vida sostenida en necesidades creadas, el consumo y generación de desechos.
 
La idea de progreso y de desarrollo de las fuerzas productivas, están presentes en el capitalismo y en los socialismos existentes hasta ahora. Y es que la idea de progreso ha sido impuesta, y está presente tanto en los modelos de vida propuestos por la derecha, como  por los de la izquierda tradicional. En este sentido, no podemos caer en la trampa de estos organismos internacionales, cuando nos presentan el tema del desarrollo como horizonte a seguir.
 
El problema de fondo es un sistema que asume necesidades infinitas para vender productos infinitos, pero lo que no toma en cuenta ese sistema es que el planeta tierra es finito.
 
Es entonces que según estas responsabilidades debemos preguntarnos: ¿cómo se expresa el capitalismo?, ¿quién lo representa?, configurar las principales responsabilidades en las élites de poder, coloniales y burguesas de la sociedad occidental, con recursos y poder económico, militar, industrial, y político.
 
Paralelamente debemos reflexionar y accionar, incluyendo en el debate la responsabilidad individual, representada en  los hábitos de consumo que suman a la huella ecológica en el planeta. Siguiendo el mismo modelo energético, y el mismo patrón de consumo contribuimos gradualmente a la crisis y sosteniendo el modelo hegemónico.
 
Sin embargo, no creemos sólo en soluciones individuales. Venimos cuestionando el modelo y organizándonos en la lucha para transformarlo.
 
Como venezolanos reconocemos la gran contradicción que tenemos en esta lucha pues somos un país sustentado fundamentalmente en la producción petrolera, sabiendo que el combustible fósil es una de las principales causas del cambio climático. Reconocemos y apoyamos el esfuerzo del gobierno revolucionario en la diversificación de nuestra economía y la búsqueda de formas sustentables de producción. El petróleo ha sido nuestra herramienta fundamental en la búsqueda de la justicia social y la unión de los pueblos, sin embargo sabemos que no es la forma más sustentable y como pueblo unido debemos buscar otras formas de sostenernos basadas en el desarrollo endógeno.
 
Esta oportunidad de denunciar el modelo de desarrollo norteamericano, pero también tenemos que hablar del nuestro y de las empresas asociadas a estas actividades y realizar las transformaciones que sean necesarias, reconociendo que ya algunas han sido impulsadas por el Presidente Chávez y por los movimientos sociales, mas el camino es largo.
 
En cuanto a las transformaciones, hay que tomar en cuenta que también lo ecológico está siendo manipulado como una mercancía, en forma de capitalismo verde, individualizando además las posibles soluciones, haciendo creer que no es un problema del sistema, que no hay que cambiarlo, sino que pasa por ser más “conscientes”, reciclar, reutilizar, etc. Creemos que es cierto que hay que cambiar los modos de vida desde lo cotidiano, pero también es cierto que las soluciones no pueden ser individuales sino colectivas.  
 
Debemos combatir: el uso liberal del ambientalismo. La presencia de muchas ONG, trasnacionales de la conservación, con posturas liberales y socialdemócratas. Los derechos de la madre tierra, por ejemplo, no pueden ser excusa para un nuevo intervencionismo ecológico. Tenemos que tener cuidado con posiciones que se presentan como bondadosas pero que encubren agendas políticas indeseables o contrapuestas al socialismo y que por tanto debemos combatir.
 
 
2.- PANORAMA GLOBAL: RESPUESTAS HEGEMONICAS
 
Situación y actores en la confrontación contra el modelo civilizatorio hegemónico
 
En términos geopolíticos e internacionales hay 2 tipos de actores fundamentales los hegemónicos y los contrahegemónicos, conformados por:
 
Alianza G8 (más Brasil y China), las corporaciones trasnacionales (petroleras, agronegocio, biotecnología, automotriz, etc.)  En este sector se distingue una postura que ya no niega el problema ni el fenómeno del cambio climático, todos lo hablan e incluyen en sus discursos, justamente eso vimos en Copenhague. Los sectores más lucidos han propuesto ya soluciones alternativas como por ejemplo el protocolo de Kyoto, el cual Estados Unidos se negó a firmar, siendo este un espacio de aparente consenso.
 
Todas las instancias capitalistas tienen en su agenda el cambio climático, todos hablan de desarrollo sostenible y sustentable, esto viene ya desde muchos años atrás, por ejemplo en las Naciones Unidas en el año 1986 se definió qué es desarrollo sostenible. Se ha venido expresando en mecanismos y propuestas que van desde lo político a lo científico, que tienden a centrar las soluciones al cambio climático en términos estrictamente técnicos, ejemplo la sustitución de combustible fósil por agrocombustibles, generación de “tecnologías limpias”, y una serie de mecanismos financieros ejemplo el mercado del carbono que lleva a la plantación de árboles transgénicos y el intervencionismos de los pueblos que aún poseen bosques.
 
Vemos ya en el mercado muchos productos ecológicos, automóviles sustentables, en fin: capitalismo verde y nada más. Hacen de la crisis un negocio, sin resolverla en sí y agravando el problema aún más. En este sentido lo político y social está externo a esto.
 
El otro actor está representado por los Estados-Nación alternativos, que cuestionan al capitalismo neoliberal y se encuentran en la búsqueda de un sistema distinto. Sin embargo, en esta lucha aun prevalecen contradicciones que encontramos en los acuerdos de los esquemas de integración como MERCOSUR, ALBA, etc. Criticamos al capitalismo pero aún las trasnacionales extranjeras nos dominan, y seguimos hablando en términos capitalistas, porque se apuesta al mismo paradigma de desarrollo. Así mismo, las alianzas de poder son heterogéneas lo que nos compromete con políticas capitalistas promovidas las élites que dirigen algunos los países.
 
También entre los actores contrahegemónicos nos encontramos los pueblos del mundo, grupos altermundistas: ecologistas, pueblos indígenas, campesinos, urbanos, distintos movimientos sociales, etc. que no sólo criticamos el cambio climático, sino  que pre