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Realizado en salón de conferencias Plaza Colprosumah
31 de octubre de 2012
Por: Carlos Tovar
 
I.- BREVES ANTECEDENTES
En el marco de este foro, Crisis Agraria y Alimentaria, que La Vía Campesina lo ejecuta con la Alianza SARA y la Plataforma Agraria tiene la intencionalidad de rememorar el Día Internacional de la Soberanía Alimentaria, que siempre se realiza el 16 de octubre de cada año; buscando visibilizar, además, que en esta misma fecha del año 2011 el movimiento campesino entregó al Congreso Nacional la propuesta de Ley de Transformación Agraria Integral.
Dicha propuesta, en efecto, se encuentra en las curules del Hemiciclo Legislativo, sin ningún trámite más que la incidencia que podamos ejercer para el logro de tan apreciado propósito, a través de nuestras movilizaciones.
II.- CONCLUSIONES
Después de escuchar  las sendas intervenciones de Yoni Rivas en cuanto a la Criminalización de la Lucha Campesina y de Gustavo Irías, respecto a los Elementos de una Agenda Agraria es, indubitable arribar a las conclusiones siguiente:
PRIMERO: Tal como lo han expresado, la Ley de Desarrollo y Modernización del Sector Agrícola ha sido la causa y el génesis del acaparamiento de tierras, a partir de la década del 90 a favor de los grandes latifundistas y empresas trasnacionales; que, si bien es cierto, esta normativa diversificó la agricultura, también se presentó amachinada con la profundización de los niveles de pobreza y la desigualdad en el campo. Asimismo, esta Ley de DMSA ha sido el génesis de los actuales conflictos agrarios, la injusticia rural y la conflictividad social, que se observa en el campo hondureño.
SEGUNDO: Si bien, hemos observado una dinámica de la lucha campesina, especialmente la demanda de la reforma agraria; aspecto éste, que debemos reconocer lo emblemático de La Vía Campesina, que permanentemente ha levantado esta bandera de lucha que se ha profundizado a partir de abril de este año; también no podemos ignorar, que ésta lucha se ha presentado signada por la división, la desunión y la fragmentación del movimiento campesino, cuya génesis viene, coincidentemente, desde el 92 con la vigencia de LMDSA y que se profundiza con el golpe de Estado en junio de 2009.
Todo esto, ha debilitado alcanzar el éxito en nuestras demandas y no poseer un movimiento campesino unificado, democrático, amplio, incluyente y ético; que ustedes, en este momento han aprobado organizarlo y constituirlo.
TERCERO: Asimismo, no contamos con una agenda común de lucha en el marco del desarrollo rural, que tenga la impronta o punta de lanza la reforma agraria y soberanía alimentaria; es decir, debemos contar con un movimiento campesino unificado, graníticamente unido, que posea una agenda común para trabajar unitariamente dentro de la diversidad, donde nadie debe quedarse afuera: mineros, pescadores, pueblos indígenas, afrohondureños, etcétera.
CUARTO: Esta agenda, única, debe estar elaborada o construida por el propio movimiento campesino hondureño, condición que es determinante; dentro de esta línea de pensamiento se tiene el ejemplo de la propuesta de Ley de TAI que exige cambiar la institucionalidad existente y darle coherencia a todo el sector público agrícola, a través de un Plan Nacional de Reforma Agraria y Soberanía Alimentaria.
QUINTO: Este foro denuncia el acaparamiento de tierras, fenómeno que es promovido en nuestro país por las élites, las inversiones nacionales, trasnacionales y el gobierno con el objetivo de controlar los recursos más preciados del país; la transnacionalización del capital financiero y la concomitante mercantilización de la naturaleza, ha desatado un flujo enorme de capitales hacia las industrias extractivas, la pesca industrial, los agrocombustibles, las plantaciones forestales y el desarrollo de las grandes infraestructuras.
III. PROPUESTAS
En consecuencia, este foro propone:
Primero: Articular en la presente conyuntura el descontento popular y nuestra indignación para construir plataformas que tiendan a la elaboración de agendas, que contribuyan al diálogo y a la unidad de los sectores opuestos al modelo neoliberal.
Segundo: Exigir, con nuestra movilización, una Reforma Agraria Integral que responda al siglo en que vivimos, debe ser una legislación que devuelva los derechos de explotación de la tierra a las comunidades campesinas y pueblos indígenas, en forma sostenible y orgánica.
Tercero: Esta Reforma Agraria que abogamos tiene una visión en torno a la soberanía de los pueblos sobre sus territorios, que además debe distinguirse por lo siguiente:
a)       Una producción agrícola y familiar para la construcción de la soberanía alimentaria.
b)       Coexistencia armoniosa, pacífica y solidaria entre campesinos, campesinas, pueblos indígenas y afrohondureños.
c)       La profundización y expansión del liderazgo de las mujeres en la lucha y acceso a la tierra y defensa del territorio.
d)       Priorizar la lucha de la juventud campesina e indígena por el acceso a la tierra y reconstrucción de las economías locales por lo que la gente joven no se vea obligada a emigrar.
Cuarto: Finalmente, este foro, se pronuncia en contra de la ocupación militar y la creciente criminalización de la lucha campesina e indígena y la defensa de sus territorios.

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