Caucus de Orientación Sexual, Discriminación Múltiple e Intolerancia Relacionada

"Penalizar la homosexualidad es otorgar licencia a la tortura"*

2001-09-21 00:00:00

El Caucus de Orientación Sexual en la CMRX aboga por los derechos de
los gays, lesbianas, bisexuales y personas transgénero. Los gays,
lesbianas, bisexuales y personas transgénero constituyen una
proporción significativa de las poblaciones en todas partes, al margen
de su ubicación sea en el Sur o en el Norte Global. La orientación
sexual es un tema fundamental para cualquier discusión sobre la
eliminación del estigma social y político y, por lo tanto, debe ser
considerada en esta discusión sobre el racismo, la xenofobia e
intolerancia relacionada.

La Declaración Universal de los Derechos Humanos de las Naciones
Unidas establece los principios de no discriminación y proclama que
todos los seres humanos nacemos libres e iguales en dignidad y
derechos, sin ningún tipo de distinción. Una vida de libertad para
gozar de los derechos humanos fundamentales, incluyendo el derecho a
estar libre de discriminación basada en la orientación sexual y la
identidad de género, presupone la eliminación del racismo, la
discriminación racial, la xenofobia y otras formas relacionadas de
intolerancia, así como de todas las formas de discriminación.

Tanto el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos como el
Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales han
sido interpretados como inclusivos de una prohibición de
discriminación sobre la base de la orientación sexual. Ambos afirman
que la orientación sexual no puede ser utilizada como pretexto para
restringir el ejercicio de los derechos humanos.

Los individuos que demuestran signos estigmatizados tanto de raza como
de orientación sexual o identidad de género, experimentan niveles
singulares y más agudos de discriminación en comparación con aquellos
que ocupan sólo una categoría estigmatizada. El racismo nunca es
experimentado en aislamiento, sino que está interconectado con la
orientación sexual y la identidad de género, el género, clase,
identidad nacional, etnia, religión, grupo lingüístico, edad,
capacidad física y trabajo y descendencia.

Por lo tanto, llamamos a todos los gobiernos a adoptar protecciones
constitucionales y otras provisiones que prohiban todas las formas de
discriminación sobre la base de la orientación sexual y la identidad
de género. La ausencia de estas provisiones constitucionales conducen
inevitablemente a violaciones como: arresto y tortura,
encarcelamiento prolongado, castigos crueles, brutalidad policial,
falta de recursos legales durante el período bajo custodia, crímenes
de odio, homicidios, amenazas de muerte, chantajes, menor acceso a
servicios de salud y discriminación en el trabajo.

Muchas personas a lo largo del mundo, al margen de su orientación
sexual o identidad de género, han contribuido y continúan
contribuyendo en todos los aspectos de una sociedad civil plena. La
pérdida de sus contribuciones a través de la violencia basada en la
intolerancia es una pérdida para toda la humanidad.

La identidad humana no puede ser fragmentada. Aquellas/os que
experimentan la discriminación sobre la base de opresiones múltiples
no estarán plenamente protegidas/os del racismo y la discriminación
racial hasta que todos los aspectos de su persona estén explícitamente
protegidos.

* Amnistía Internacional, 22 de junio de 2001