Derechos de la Madre Tierra No. 22

2010-12-20 00:00:00

¿POR QUÉ BOLIVIA RECHAZA EL ACUERDO DE CANCÚN?
1)     Consigna como objetivo limitar el incremento de la temperatura a 2ºC.  Actualmente se sufren serios impactos con un incremento promedio de la temperatura de 0,8ºC. Aceptar duplicar o triplicar ese incremento, será muy dañino para la vida humana y la naturaleza.
2)     De incrementarse el calentamiento global en más de 2º C:
·         La cifra de 300.000 muertos por año debido a desastres naturales producto del cambio climático podría ascender a más de un millón para el 2020,
·         entre un 20% y un 30% de las especies estaría en peligro de desaparecer,
·         las sequías e inundaciones afectarían diferentes regiones del planeta,
·         grandes extensiones de bosques serían afectadas,
·         se extenderían los desiertos,
·         se agravaría el derretimiento de los polos y los glaciares en los Andes y los Himalayas,
·         muchos Estados insulares desaparecerían,
·         el África sufriría un incremento de temperatura de más de 3º C,
·         se reduciría la producción de alimentos en el mundo, incrementándose el número de hambrientos que ya sobrepasa los mil millones de personas, y
·         existe el 50% de probabilidades de que los daños provocados a nuestra Madre Tierra sean totalmente irreversibles.
 
3)     Las promesas de reducción de gases de efecto invernadero de los países industrializados están entre 13% y 17% tomando en cuenta los niveles de 1990, lo que ni siquiera está en concordancia con el límite de incremento de la temperatura de 2ºC y por el contrario, lleva a un incremento de 4ºC o más.
 4)     Se han creado mecanismos de financiamiento, transferencia de tecnología y adaptación, pero no se han asegurado los recursos necesarios para su funcionamiento. La Convención de cambio climático habla de que los “países desarrollados proporcionarán recursos financieros nuevos y adicionales para cubrir los gastos de los países en vías de desarrollo”. Ahora en vez de hablar de “proporcionar”, los países desarrollados hablan de “movilizar conjuntamente” 100.000 millones de dólares para el 2020 a través de mercados de carbono, créditos, inversión privada y conjuntamente incluso con los países en vías de desarrollo. Los recursos nuevos y adicionales serán una pequeña fracción de los100.000 millones de dólares que recién se alcanzarían de aquí a 10 años. La propuesta del Estado Plurinacional de Bolivia es que los países desarrollados destinen el mismo monto que destinan para su presupuesto de defensa, seguridad e incluso guerras para atender el cambio climático. Ese monto es quince veces superior al que ofrecen “movilizar”, y es dinero público que cada año otorgan para sus presupuestos militares (1.500.000 millones de dólares).
 5)     No es correcto que el Banco Mundial administre el nuevo “Fondo Verde” ya que es una institución controlada por los países desarrollados y que impone condicionalidades que muchas veces afectan la soberanía de los países en vías de desarrollo. 
6)     Se ha eliminado toda referencia al tema de los derechos de propiedad intelectual del Mecanismo de Transferencia de Tecnología cuando es de público conocimiento que entre el 70 % y el 80 % de las patentes de tecnologías climáticas están en manos de empresas privadas de los países industrializados. 
7)     Impulsa el establecimiento de nuevos mecanismos de mercado a través de los cuales los países desarrollados traspasarán su responsabilidad de reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero a los países en vías de desarrollo. De otra parte, este mecanismo de mercado acabará financiando a los países industrializados ya que una empresa del Norte se ahorrará mucho dinero comprando “certificados” de carbono en países del Sur, en vez de hacer las reducciones que debería hacer en su propio país. 
8)     Promueve una metodología de valoración monetaria de la capacidad de captura de carbono de los bosques para iniciar un nuevo tipo de mercado de carbono, que significará el comienzo de la mercantilización de las funciones de la naturaleza. Bolivia propone la creación de un mecanismo para los bosques que sea de carácter integral, que parta de definir cuánto se necesita para preservar y ampliar los bosques. Es decir, que apoye los planes de preservación, recuperación y gestión sostenible de los bosques en función a lo que se necesita para esa tarea y no en relación a lo que supuestamente valdrían en el mercado. Los mercados de carbono van a tardar en desarrollarse 8 a 10 años cuando lo que necesitamos es financiar desde año que viene los planes de gestión y conservación de los bosques en países como Bolivia. En síntesis, queremos salvar los bosques y no hacer un negocio con los bosques. 
9)     El Acuerdo de Cancún es un reciclado del mal llamado Acuerdo de Copenhague que hace un año atrás rechazamos. La Secretaria de Estado Hilari Clinton declaró en relación al Acuerdo de Cancún: “Este resultado adelanta cada uno de los elementos centrales del Acuerdo de Copenhague”.
Bolivia fue coherente y consecuente con su posición del año 2010. 
10)  Los procedimientos a través de los cuales se adoptó el Acuerdo de Cancún violan los principios del multilateralismo: El documento final recién fue conocido a las 4 de la tarde del último día. En el caso del Protocolo de Kioto nunca se negoció ni conoció ese texto hasta el último día. El Estado Plurinacional de Bolivia nunca expresó, ni mandató para la elaboración de este documento. El documento fue elaborado en su versión final por un pequeño grupo. No se aceptó discutir ni negociar una sola coma del documento que fue presentado a última hora. La delegación de Bolivia dijo textualmente en la plenaria: “Permítame expresarle con claridad que el Estado Plurinacional de Bolivia, y quiero pedir que quede en actas para que no haya ninguna mala interpretación, no acepta, rechaza este documento, por lo tanto no hay consenso para su adopción. Que quede absolutamente y claramente registrado.” A pesar de ello, la Presidenta de la COP 16 dio por aprobados dichos documentos, sobrepasando la regla del consenso que establece que cuando un país manifiesta expresamente su desacuerdo no hay consenso y por lo tanto éste no se puede adoptar. Cancún fue peor que Copenhague porque en la COP 15 se respetó la regla del consenso y no se adoptó el “Acuerdo de Copenhague” en cambio en México se pasó por encima esta regla para imponer el “Acuerdo de Cancún”.
BOLIVIA DEMANDA EN LA CORTE DE LA HAYA EL DOCUMENTO DE CANCÚN
 
La Paz,  (ABI).- El presidente Evo Morales anunció el lunes que Bolivia presentará una demanda ante la Corte Internacional de Justicia de la Haya para invalidar el documento aprobado en la Cumbre sobre el cambio climático de Cancún.
En una conferencia de prensa, Morales rechazó el documento  porque aseguró que su aprobación no respetó los procedimientos.
"Desde el momento que uno, dos, o 10 países no aceptan un documento, ese documento es inválido y, por tanto, el Estado Plurinacional va a hacer una demanda ante la Corte Internacional de Justicia del Haya, porque esta conferencia no ha respetado los procedimientos aprobados en esa convención marco sobre el cambio climático", argumentó.
Sustentó su determinación mostrando documentos donde dijo está establecido que todas las decisiones deben ser aprobadas por todos los países, al recordar que Bolivia no rubricó la resolución de Cancún.
"El texto de Cancún fue impuesto sin consenso", insistió y aseguró que su costo se medirá en vidas humanas porque, a su juicio, es un acuerdo sólo de los poderosos.
"Bolivia llegó a Cancún de buena fe, con propuestas concretas emergentes de la histórica Conferencia Mundial de los Pueblos realizada en Cochabamba en abril de este año, buscando soluciones justas y abordar sus causas profundas, dispuestos a ceder en muchas cosas, salvo la vida de nuestros pueblos del mundo", argumentó.
Denunció que con ese documento, la temperatura se elevará a más de 4 grados centígrados y sus efectos serán devastadores.
A su juicio, si los científicos informan que por año mueren al menos 300 mil personas, por los efectos del cambio climático, con ese documento, "por año morirán más de 1 millón de seres humanos"
"Por eso es nuestro rechazo", matizo.
 Aseguró que las naciones ricas no ofrecieron nada nuevo en la reducción de gases de efecto invernadero o de financiación, contrariamente buscaron disminuir su obligación de actuar con mecanismos de subvención nada claros.
El presidente boliviano anuncio que su país seguirá dando batalla junto a los pueblos del mundo porque no se puede renunciar a la vida, a la humanidad a los derechos de la Madre Tierra, planteamiento que impulsó en Cancún.
Por esa razón, dijo que ratifica su posición de que el hombre, el ser humano no puede vivir sin el planeta, mientras que el planeta, la Madre Tierra, puede existir sin el ser humano.

 "Por tanto si queremos defender los derechos humanos tenemos que defender los derechos de la Madre Tierra, la mejor forma de defender los derechos humanos es defendiendo los derechos de la Madre Tierra", justificó.
"Será otra batalla de carácter internacional y sólo (quiero) pedir a los pueblos del mundo a acompañar esta lucha, una lucha por una justicia en el cambio climático, porque no se ha tomado en cuenta muchos planteamientos, como por ejemplo la creación de un Tribunal  Internacional de Justicia Climática, no se aceptaron, ni se tomaron en cuenta, especialmente la estabilización de la temperatura en 1 grado centígrado", sentenció.
INTERVENCIÓN DE BOLIVIA EN LA SESIÓN DE INFORME DEL GRUPO DE TRABAJO ESPECIAL DE COOPERACIÓN A LARGO PLAZO
 Primera participación Madrugada del sábado 11 de diciembre
René Orellana
 Señora presidenta, queremos expresarle con absoluta claridad que en la reunión correspondiente al grupo LCA hemos manifestado, previa explicación detallada y exposición de nuestros argumentos, nuestras ideas, nuestras preocupaciones, que estamos absolutamente en contra de la aprobación de un documento, de un borrador de decisión, que en nuestra opinión no recoge la discusión y el proceso de negociación que hemos desarrollado a lo largo de este año.
Señora presidenta, estimados colegas, de ninguna manera pretendemos ejercer un “derecho a veto”. El veto no es, en nuestra opinión, un mecanismo democráti