Colombia: CRIC ante el rompimiento Proceso de Paz

2002-02-22 00:00:00

Declaración

Los pueblos indígenas del Cauca, al observar la crisis del proceso de
diálogo Gobierno-FARC, consideramos que continua en juego el querer de los
defensores de la vida, que planteamos la posibilidad de la convivencia sin
violencia contra el de los impulsores de la guerra, que insisten en
demostrar a los ciudadanos de Colombia y del mundo que es inevitable la
continuación del proceso de invasión y muerte establecido en el territorio
americano desde hace mas de 500 años.

Por eso los pueblos indígenas del Cauca le decimos al país y al mundo:

... Que continua el clamor de nuestra gente, expresado durante varias
décadas, en el sentido de insistir en la solución política a los
conflictos y el desarrollo de políticas de defensa de los derechos
fundamentales.

... Que los sectores sociales requieren de voceros que entiendan por qué
las gentes de las zonas rurales y selváticas del país repudiamos la
guerra, así como la repudian los habitantes de las ciudades que viven en
los cordones de miseria como víctimas del desplazamiento generado por
otras guerras silenciosas que ha vivido el territorio nacional.

... Que no se entiende por qué los medios de información no divulgan las
iniciativas y los procesos sociales de unidad que se están viviendo en
lugares distantes del centro del país como alternativa a la guerra, a la
corrupción y a otros males que sufre la sociedad colombiana, ni se
promueven las propuestas de solución política al conflicto social,
político y armado que vive la sociedad de nuestro país así como de cambios
hacia el desarrollo de políticas sociales y de defensa de los derechos
humanos y del derecho internacional humanitario.

... Que tampoco el gobierno nacional se ha preocupado por divulgar las
iniciativas sociales frente al Proceso de diálogo y se niega a implementar
acciones concretas y políticas económicas que ayuden a cerrar la brecha
entre pobres y ricos ni garantiza que sus Fuerzas armadas imp! lementen
una actitud de respeto sobre la población desarmada.

... Que entendemos que la decisión tomada por los voceros del proceso de
paz de terminar los diálogos y endurecer las acciones de guerra propiciará
el escalamiento de las acciones armadas de los grupos insurgentes y el
fortalecimiento de los paramilitares en contra de la población civil.

... Que continuamos nuestra insistencia de cesar la impunidad en Colombia
y nuestro rechazo al incremento de las acciones armadas de los grupos
insurgentes a nuestros poblados, al fortalecimiento de los grupos
paramilitares y sus acciones terroristas, así como a la presencia de las
Fuerzas Armadas del Estado como ejércitos de ocupación en las zonas
rurales del país.

... Que para nosotros las razones de los pueblos y comunidades no han sido
tenidas en cuenta por el gobierno Nacional pero si escucha los consejos de
las empresas multinacionales que apoyan la política del Plan Colombia y
que exigen expulsar a las gentes pobres de las zonas geoestratégicas y
polos de desarrollo del país.

... Que requerimos de la comunidad nacional e internacional su comprensión
sobre la situación vívida por las comunidades rurales del territorio
colombiano, víctimas de dos guerras igualmente inhumanas:

La guerra de las armas y aquella guerra agenciada por el abandono
institucional, el desarrollo de normas contrarias a las aspiraciones
sociales y las políticas económicas que responden mas a los intereses
internacionales que a las necesidades de las mayorías del país.

Por ello, en este momento histórico consideramos que quienes se asuman
como verdaderos voceros del pueblo colombiano deben apropiar una actitud
inteligente que les permita trabajar por el fortalecimiento de la imagen
del país resaltando sus potencialidades, fortaleciendo la diversidad
cultural existente, permitiendo la participación real de la sociedad civil
para encontrar consensos sociales a través de jornadas de consulta y
concertación que fortalecerían la autodeterminación del Estado en el
contexto internacional.

Por último, los pueblos indígenas del Cauca le decimos al Presidente de
Colombia y al Secretariado de las FARC que lamentamos el rompimiento de
los diálogos, hechos en contra de la gestión adelantada por la comunidad
internacional, especialmente del delegado de las naciones unidas, ONU, que
interpretando las aspiraciones de la sociedad civil colombiana, incidió
como parte fundamental para el mantenimiento del proceso, sin embargo ante
la situación actual, como pueblos activos en la busca de la convivencia,
insistimos en nuestra sugerencia de evitar la intensificación de la
confrontación armada y retomar las razones de paz expuestas por quienes
somos las verdaderas víctimas de la guerra.

Por nuestra parte, llamamos a las autoridades tradicionales de los pueblos
indígenas y la comunidad en general para que se mantengan alerta frente a
cualquier novedad de agresión externa, y asuman medidas de control interno
con asambleas permanentes que permitan continuar con nuestra autonomía
territorial y nuestro proceso de resistencia milenaria.

Atentamente

Consejeros Indígenas CRIC

Popayán, febrero 21 de 2002