Huracán MITCH
Honduras lleva la peor parte
Honduras es el país más afectado por el paso del huracán y tormenta Mitch que azotó a
Centroamérica a fines de octubre y comienzos de noviembre. De las 31.000 víctimas fatales
-entre muertos y desaparecidos- ocurridas en toda la región, 25.000 corresponden a este país.
En 1974 pasó por Honduras el huracán "Fifi", que dejó 10.000 muertos y una economía debilitada
de la que aún no se recupera. Ahora, el huracán Mitch ha golpeado más fuerte que el Fifi. En esta
tragedia, considerada la peor del siglo, los damnificados superan los dos millones, es decir que
uno de cada tres hondureños están sufriendo las secuelas del Mitch. Muchos de los
damnificados/as que perdieron sus viviendas y todos sus enseres se concentraron en los albergues
en espera de ayuda, pero un gran número, hasta el 10 de noviembre, todavía no podía ser evacuado
de las zonas inundadas, ubicándose en los techos de las casas y edificios. En varios albergues de
San Pedro de Sula, la segunda ciudad hondureña más importante después de Tegucigalpa, se
concentraron más de 48.000 evacuados los que sufren por falta de agua y alimentos.
Desolación y enfermedad
Las enfermedades y epidemias se extendieron rápidamente por las áreas de refugio, resultando
particularmente afectados los niños. Debido a la contaminación de las aguas y el lodo que ha
quedado acumulado en las poblaciones, la gente sufre de diarreas, enfermedades de la piel,
afecciones de los pies y conjuntivitis. También amenaza el temible cólera, el dengue hemorrágico
y el paludismo.
La situación se agrava, porque las aguas de los ríos quedaron infectadas al mezclarse con heces
fecales, además que arrastraron restos, en estado descomposición, de animales o personas que
perecieron ahogados o enterrados en el lodo. Una de las zonas más afectadas es el municipio de
La Lima, departamento de Cortés, en donde las fuertes crecidas del río Chamelecón acabaron con
unas 215 casas, quedando el agua y el lodo estancados por varios días.
Las pérdidas materiales se calculan en unos 2.000 millones de dólares. El número de viviendas
totalmente destruidas oscila entre 70 mil y 80 mil, según estimaciones del Fondo Social de la
Vivienda, FOSOVI. Las casas dañadas pero susceptibles de ser recuperadas varían entre las 120 y
160 mil unidades. Según el FOSOVI, se requieren 636 millones de dólares para atender el sector
social de la vivienda destruido por el Mitch.
Los sistemas de agua potable y alcantarillado sufrieron severos daños. Tegucigalpa fue
severamente afectada. En San Pedro de Sula, el Mitch dejó fuera de servicio todas las fuentes
principales, provocó fallas en los sistemas de impulsión y en los pozos, reduciendo
considerablemente la capacidad de producción de agua potable.
Al menos 83 puentes cayeron por la furia de la naturaleza y cientos de kilómetros de carreteras
sufrieron graves daños, impidiendo la comercialización de los productos agrícolas.
Agricultura arrasada
Las pérdidas en el campo son cuantiosas. Se estima que el 70% de la producción agrícola fue
arrasada por la furia de la aguas, que acabó con las plantaciones de café, plátano, maíz, trigo,
algodón, caña de azúcar y tabaco. Aunque aún no se tienen cifras sobre las pérdidas ocasionadas a
la ganadería, se estima que el Mitch le dio el "tiro de gracia" a este sector que ha venido
atravesando situaciones difíciles en los últimos años.
No solo ha sido afectada la agricultura de exportación sino la pequeña agricultura que permite la
subsistencia de millones de campesinos/as que se quedaron en el desamparo: sin cosechas, sin
techo, sin alimentos, sin vestidos.
En la costa atlántica que comprende los departamentos de Islas de las Bahía, Colón, Gracias a
Dios, Atlántida, Cortés y Yoro, pueblos y ciudades quedaron incomunicadas y destruidas, siendo
afectados los pueblos: Negros Isleños, Garífunas, Miskitos y Tolupanes.
Ante la magnitud de la hecatombe y para hacer frente a las tareas de la reconstrucción, Nicargua y
Honduras pidieron la condonación de su deuda externa. En el caso de Honduras, la deuda asciende
a 3.800 millones de dólares y absorbe entre el 35 y el 40% de sus ingresos. Esta petición tuvo
una respuesta favorable de Cuba que condonó la totalidad de la deuda de Nicaragua que asciende a
51.1 millones de dólares y de Francia que anuló las deudas contraídas por los países
centroamericanos, mientras una política similar se estudiaba en Alemania.
Asimismo, Honduras solicitó a Estados Unidos que, por razones humanitarias, suspenda las
deportaciones de hondureños/as. Unos 600.000 hondureños/as viven en Estados Unidos, de los
cuales 80.000 se encuentran indocumentados y 8000 han sido deportados desde 1997 hasta la
fecha.
Hoy por tí...
La ayuda internacional comenzó a hacerse presente desde varios países. Estados Unidos,
temeroso de que la arruinada economía centroamericana incremente el número de inmigrantes a
este país, destinó un monto de 40 millones de dólares y envió 32 helicópteros y más de 1000
hombres para las tareas de rescate y reconstrucción. La Comunidad Europea ha comprometido
una ayuda de 84 millones de dólares para los países afectados por el Mitch.
Se debe destacar, sin embargo, los esfuerzos que está haciendo la sociedad civil internacional
para ayudar a los hermanos hondureños en esta hora de angustia y dolor. Un caso digno de
mencionarse es la movilización ciudadana en España para prestar ayuda humanitaria a Honduras:
en menos de 15 días recaudó 40 millones de dólares, una cifra similar a la anunciada por el país
más rico y poderoso de la Tierra.
La solidaridad y cooperación internacional serán de gran ayuda, pero las tareas fundamentales
están en manos de los hondureños y hondureñas, porque, como dijo un ciudadano anónimo de este
país, "en medio de la tristeza y el luto que nos embarga, se perciben deseos de luchar y sacar
adelante a nuestra nación".